Este libro es una especie de cajón de
sastre. No porque lo haya escrito alguien que se apellida Sastre,
sino porque es una colección de pensamientos, notas de lectura, aforismos, citas,
ocurrencias, anécdotas, comentarios sobre cine y poesía. Se
caracteriza por dos rasgos: la variedad, pues los textos no siguen una unidad
temática, y la brevedad, ya que la mayoría de las reflexiones no suelen pasar
de un par de párrafos. Es un libro que no requiere la constancia de seguir un
hilo argumental y permite el picoteo reflexivo, pues la
lectura queda abierta al orden que desee el lector.
En estas reflexiones el autor
transmite belleza, provoca emoción y en ningún caso aburre. La vida supone
una fuerte y repentina inmersión; llegamos a ella de golpe y nos arrastra con
su corriente igual que un río. Es conveniente detener esa inercia para mirar la vida desde
fuera, como un espectador, pues, como señalaban los estoicos, vivir es fácil,
lo complicado y meritorio es saber vivir y que algunos de estos textos ayuden al lector a reflexionar sobre la vida con otra luz y desde
la calma de estar en la orilla.